Mano elemental:
Mano elemental. La palma está bastante
desarrollada, gruesa, espesa y dura. Dedos rígidos y cortos. Las uñas cortas.
El pulgar corto, recto, casi truncado. Por su forma, es la mano más corriente,
vulgar; carece de delicadeza en sus movimientos. Los seres que poseen estas
manos son apáticos, groseros, más bien brutales. Son personas que realizan
trabajos físicos, pesados, rudos, aunque esta forma de ser no indica siempre,
necesariamente, un fondo negativo. Se conforman, no tienen grandes metas, ni
pretensiones. Cumplen, sin embargo, su cometido; pues son personas muy
necesarias para el progreso del mundo.
Mano cuadrada o útil:
Mano cuadrada. Es una mano eminentemente
cuadrada, como su nombre indica. En su estructura más pura, las falangetas
parecen aplastadas. Su tamaño es normal, a veces grande. Dedos cuadrados en las
extremidades. Pulgar grande. Palma recia y firme. Es la mano de los individuos
precisos, perseverantes. Usan siempre la razón, la lógica, son razonadores y se
controlan muy bien. En ocasiones se distinguen por cierta ruindad mental en su
manera de actuar. No se sienten inclinados hacia ningún arte. Les gusta
sentirse seguros. Suelen ser puntuales; pero lo juzgan todo bajo un prisma más
bien severo. En general, son buenos padres, están dotados para la
administración, si bien carecen de intuición y fantasía.
Las
profesiones idóneas para ellos son: educación, ciencias y cuanto esté
relacionado con la actividad burocrática.
Mano de espátula o necesaria:
Quizá es la más curiosa, debido a la
forma un tanto extraña de los extremos de las falangetas; la punta de los dedos
ancha y la falangeta más estrecha. Son – para recordarlo mejor – un poco dedos
de rana.
Pertenecen a hombres prácticos para los
cuales es imprescindible la acción. Se caracterizan por su dinamismo,
inventiva, habilidad para sortear los obstáculos; son infatigables y siempre
están planeando algún proyecto o empresa. Tienen poca capacidad de asombro ante
los acontecimientos de la vida. Trabajadores incansables, suelen ser buenos
colonizadores de tierras sin explorar. Les gusta mucho que se reconozcan sus
méritos personales, pues pecan, a veces, de vanidosos. Su meta es lo grandioso
y cuantas más barreras o dificultades encuentren en su camino, más empeño ponen
en allanarlas y salir triunfantes y airosos.
Desprecian lo pequeño e insignificante,
sintiéndose subyugados por lo grande y espectacular. No entienden de fantasías,
como tampoco de ciencias que requieran investigación o sentido filosófico. Su
lema es, por encima de todo, la acción y la energía. Por otra parte demuestran
cierta habilidad hacia trabajos minuciosos.
Mano cónica o artística:
Mano cónica. Se caracteriza esta mano
por su forma agradable y armoniosa; generalmente, bien proporcionada. Si la
palma es carnosa, blanda, y con los montes abultados, significa que la persona
es sensual y, por lo tanto, ama los placeres, los goces materiales.
Este tipo de mano refleja a las personas
sensibles, intuitivas, susceptibles, con facultades creativas, caprichosas y
volubles. Sienten gran entusiasmo por lo bello; en suma, predomina más en ellas
lo psíquico que lo material o grosero. Pueden dejarse llevar, con frecuencia,
por los impulsos. Su instinto está muy desarrollado. Aman la poesía, la música,
las artes en general; es en realidad para lo que están más dotados
profesionalmente. Podemos ver con frecuencia a muchos actores y actrices con
este tipo de manos.
Mano
nudosa o filosófica:
Mano nudosa. Cabe destacar en ella la
peculiaridad de los dedos: abultados en la unión de las falanges. Su tamaño es
normal, más bien pequeño. Pulgar fuerte. Conviene destacar la importancia de
los nudos. Hablan de orden y meticulosidad. Si están más desarrollados los de
las falangetas, el orden en la persona será psíquico; mientras que si se trata
de los segundos (falanginas), expresarán una tendencia hacia la realización
material.
En todo caso, los seres que poseen este
tipo de manos son bastante sinceros, nobles de sentimientos, con sentido de la
moral y de la justicia. No se fían de las apariencias y tratan de ahondar en la
verdad de las cosas y de las gentes. Su mente es profunda y analítica. Están
muy capacitados para los estudios filosóficos e investigaciones científicas. Es
la mano del idealista.
Mano psíquica o mística:
Mano psíquica. Es la mano esencialmente
más bella de los siete tipos que existen. Su aspecto denota espiritualidad,
gran idealismo, armonía. La persona que tenga estas manos está en relación
directa con las vibraciones del alma. Son sumamente psíquicas y odian lo soez,
lo bajo. Sus dedos suelen ser lisos, sin nudillos.
Se
trata de personas con excelentes ideas, pero en cambio, debido precisamente a
su delicadeza espiritual, no son aptos para trabajos físicos. Pasan con facilidad
de la alegría a la tristeza, del optimismo al pesimismo. Son, a menudo, lentas
e imaginativas. A causa de su debilidad, sufren mucho en nuestra sociedad,
donde no se les comprende e incluso se abusa de ellas. Es la mano de los
místicos y seres muy evolucionados espiritualmente; por consiguiente, es la
mano más bella y superior en este orden citado.
Mano mixta:
Mano mixta. Sus dedos son muy distintos
entre sí, pues, en realidad, están mezclados de los diferentes tipos de mano
que hemos ido analizando. El índice y el anular suelen ser cuadrados, mientras
que el dedo medio y el meñique pueden ser puntiagudos; pulgar tirando a grande.
Estos, por resaltar los casos más frecuentes, porque la verdad es que esta mano
se encuentra bajo las combinaciones más variadas; de modo que, para su estudio,
se imponen el análisis por separado, viendo a que tipo corresponde cada dedo.
De
cualquier forma, dichas manos hablan siempre de individuos cómodos, listos,
prácticos, útiles. Son dados a iniciar una serie de profesiones o conocimientos
variados, aunque no suelen llegar a cotas muy altas, por faltarles la
constancia en estas iniciativas. Es muy frecuente encontrar este tipo de manos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario